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¿Cómo Emprender un Negocio Siendo Estudiante?

Desde las historias sobre la creación de empresas en garajes que cambiaron el mundo, el sueño de crear tu propio negocio y tener éxito está presente en la mente de miles de personas. No faltan historias de éxito e incluso de fracaso, pero pueden inspirar a enfrentar los desafíos e incluso las derrotas y seguir adelante.

Los estudiantes también pueden ser emprendedores y cada vez más personas quieren explorar la idea de ser dueños de su propio negocio desde temprana edad. Pero ¿es una buena idea emprender antes de incluso dejar el aula? La respuesta se encuentra a continuación.

Precauciones a tomar

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Además de requerir una inversión financiera con la apertura de una empresa, inversión en estructura física y tecnológica, posible contratación de empleados, impuestos y mucho más, emprender también requiere una inversión de tiempo: el tiempo dedicado a poner en marcha el proyecto y que podría ser utilizado en otras cosas no se recuperará.

Entonces, la primera pregunta que debes responder es: ¿estás preparado para esto?

Solo tener una buena idea no es suficiente para emprender y los estudiantes, que suelen ser más jóvenes, deben contener su impulso y seguir paso a paso el desarrollo de una idea hasta la acción.

Un ejemplo de una buena idea es el DoMyHomework123 que une a estudiantes e interesados en un determinado tema con escritores profesionales que pueden desarrollar cualquier tema y realizar ensayos completos sobre un tema específico. Ideas como estas pueden tardar en desarrollarse, pero su utilidad se demuestra rápidamente y el negocio progresa.

¿Sabes vender tu idea?

Un buen ejercicio para comenzar el proceso de emprendimiento es vender tu idea en una frase. ¿Puedes definir tu idea de esta manera, de modo que puedas explicarla a una persona en la calle, a un posible cliente, a tus familiares y a un profesor?

Vender la idea desde el principio es crucial, ya que es en estos primeros pasos donde ganarás confianza y el impulso necesario para seguir adelante. Entonces, si tu idea es un poco confusa o aún no está completamente lista, siéntate, respira y trabaja en esa venta. Solo al poder explicarla en una frase podrás presentar un plan de negocios.

Buscar ayuda

La falta de experiencia de un estudiante, especialmente en cómo puede funcionar el mercado, requiere que busque ayuda en diversas áreas: ventas, inventario, tecnología, asesoría legal, contabilidad y más.

Cuantas más personas estén involucradas, mayor será la base de conocimientos para avanzar sin sorpresas y planificar mejor los próximos pasos.

Utilizar la tecnología

estrategias de marketing en redes sociales

La tecnología es una gran facilitadora para los emprendedores, especialmente para los estudiantes que son nativos digitales, aquellos que han crecido con Internet, teléfonos inteligentes y computadoras desde temprana edad.

La tecnología puede permitir acciones de marketing más efectivas desde el principio, una gestión optimizada, una comunicación más fácil con los proveedores, un servicio al cliente más eficiente, cobros y pagos eficientes y mucho más.

No descuides tus estudios

Especialmente si el curso está relacionado con el negocio que estás creando, seguirá siendo una fuente de conocimiento muy importante, así como de contactos y nuevas ideas. No descuides tu formación educativa, que es fundamental para cualquier persona, independientemente del camino elegido.

Buscar colaboraciones

Dada tu relativa falta de experiencia, queda claro que buscar ayuda es muy importante. Pero debes ir más allá: si es posible, busca socios. Pueden ser socios para esta empresa o negocios complementarios que puedan ayudar a promover tu idea.

El mundo de los startups está lleno de inversores, incubadoras y un sistema de apoyo muy importante. Pero algo que existe desde mucho antes son las famosas empresas asociadas que pueden vender tu producto o crear paquetes conjuntos.

Realizar un análisis completo

Una vez que tu idea esté mejor formulada, es hora de dar los pasos más concretos. Se necesita un análisis DAFO, que incluya debilidades, amenazas, fortalezas y oportunidades, así como conocer a la competencia en detalle. ¿Qué ofrecerás de manera similar? ¿En qué te diferenciarás?

Es importante recordar que, en muchos sectores, la competencia está en constante cambio, al igual que el comportamiento de los posibles clientes y lo que se ofrece. Tenlo en cuenta, especialmente en relación con los competidores que tienen una mayor capacidad de innovación y hacia dónde pueden dirigirse.

Conclusión

Los estudiantes pueden aprovechar el ímpetu y la emoción de lo que acaban de aprender y crear ideas desde cero que sean realmente especiales. Pero es necesario tener cuidado y saber muy bien qué pasos dar. La paciencia siempre será una virtud.