Con un poco de esfuerzo, puedes convertir un viaje de campamento en una emocionante aventura. Si deseas sentir la emoción de adentrarte en la naturaleza y encontrar tu camino de regreso, aprende a planificar tu ruta cuidadosamente: qué debes llevar, cómo planificar tu ruta y cómo mantenerte seguro, tanto a ti como a tu grupo.
Algunos puntos clave para planificar una ruta de senderismo:
El tiempo y la distancia son los dos factores principales para planificar una ruta de senderismo. Si tienes tiempo limitado, debes decidir cuánta distancia cubrirás en un día. También debes asegurarte de que la ruta que elijas se adapte a tus capacidades físicas.
Si tu caminata se limita a los fines de semana, vale la pena encontrar un itinerario que te permita pasar más tiempo en el «sendero» en sí que en la carretera o en zonas habitadas. ¿O tal vez buscas un lugar específico que valga la pena el tiempo invertido en el sendero? ¿O también un hermoso lago y prados verdes? Estos aspectos ayudarán a dar forma a la logística de la caminata.
¿Vas solo o en grupo? Si estás solo, no tienes restricciones, puedes caminar a cualquier velocidad y elegir cualquier lugar para dormir. Sin embargo, si no estás solo, debes adaptarte al ritmo de la persona más lenta en tu grupo.
Ten en cuenta que los senderos de verano pueden no ser accesibles en invierno y, al contrario, los obstáculos de agua pueden cruzarse fácilmente en invierno.
Ahora que has elegido una ruta, es hora de planificar el itinerario para cada día de la caminata. Imprime un mapa topográfico y estúdialo.
2. Fuentes de agua, ¿es necesario llevar filtros o es suficiente hervir el agua? ¿La ruta pasa por zonas habitadas donde puedas comprar o conseguir agua? Si vas en invierno, ten en cuenta que el consumo de gas será mayor al derretir nieve en una estufa de gas.
3. El mapa te mostrará el terreno, la falta de bosques, elevaciones y dificultades para cruzar cuerpos de agua. Donde puedes hacer una pausa durante el día con una buena vista.
Ahora que has decidido los detalles de tu itinerario, debes determinar la lista de equipo que llevarás. Cuando planeas el viaje, primero solo te vienen a la mente cosas comunes como zapatos y comida. Sin embargo, a veces puedes tomar un descanso, sentarte en silencio y, por ejemplo, leer tus cómics franceses favoritos. Así que hacer una lista es un elemento realmente crucial en la planificación de una ruta de senderismo.
Una persona promedio consume de 2,5 a 4,5 mil calorías bajo carga por día. Ten esto en cuenta al planificar la ruta y decide en qué formato llevarás la comida, cruda y preparada al instante o alimentos ligeros de sublimación. También puedes optar por alimentos preparados del tipo «listo para comer».
Si vas a caminar en la temporada de insectos chupasangre y otros, ¿vas a necesitar ropa especial o es suficiente llevar un repelente de insectos?
Asegúrate de que tu mochila esté intacta, que tu tienda no tenga agujeros ni cremalleras defectuosas. La estufa de gas no debe tener fugas de gas y todo el equipo debe estar en buen estado de funcionamiento. Si es posible, antes de una gran caminata, haz una breve caminata en el bosque con el equipo que llevarás en la ruta.
Si estás caminando en grupo, decide quién llevará qué para evitar duplicaciones de cosas o, por otro lado, la falta de algo importante (cuando todos pensaban que un amigo lo llevaría).
Entonces, todo está listo, has empacado tu mochila, has planificado tu ruta y solo tienes que esperar el día de la caminata y partir. Sin embargo, hay un par de cosas que debes hacer. Después de armar la mochila, póntela, si es demasiado pesada, revisa la lista de cosas, ¿hay algo que puedas dejar en casa?
No olvides consultar el pronóstico del tiempo. Es mejor cancelar el viaje si el clima es realmente malo, con lluvias intensas y viento.