Cuando se administra una oficina o un coworking, hay 2 cosas clave: garantizar la comodidad de las personas que ocupan el espacio y mejorar la eficiencia energética para reducir costos operativos y para apostar por la sostenibilidad. Todo eso suena algo difícil de lograr, pero es posible usando materiales inteligentes.
En este artículo, te explicaremos qué son los materiales inteligentes, cómo mejoran la climatización en oficinas y en coworkings, y qué tipos hay en el mercado. Ponte cómodo en el asiento, baja el cursor y no te pierdas de nada.
Los materiales inteligentes son aquellos capaces de modificar sus propiedades físicas o químicas gracias a estímulos externos. En el caso de la climatización en las oficinas y en los coworkings, reaccionan a los cambios de temperatura, ajustando el calor o el frío que hace dentro de los espacios de forma controlada y automática.
Para que lo entiendas mejor, veamos un ejemplo.
Supongamos que instalas un aislamiento térmico inteligente en tu espacio de trabajo. Gracias a sus propiedades, este material es capaz de reflejar el calor y la radiación solar en los días soleados para evitar que la habitación se caliente de forma excesiva, mientras que, en el invierno, puede modificar su estructura para atrapar el calor interior y, así, mantener la temperatura; la ventaja de ello es que no dependerías tanto de la calefacción.
Los materiales inteligentes no solo mejoran la climatización en las oficinas y en los coworkings, aunque no podemos negar que esa es una de sus principales ventajas. Hay otros beneficios de usar este tipo de elementos en tus espacios:
Para que lo veas mejor, hablemos de algunos materiales inteligentes.
Un panel aislante térmico para controlar temperatura y humedad sirve para las paredes, para los techos y para las fachadas, y se adapta a las condiciones externas. Esto significa que, en el verano, refleja la luz solar y el calor, lo que evita que la oficina o el coworking se caliente demasiado; en cambio, durante el invierno, absorbe el calor de la radiación solar y lo retiene en el interior, garantizando que los espacios se mantengan cálidos sin necesidad de usar la calefacción con tanta frecuencia.
Los Materiales de Cambio de Fase (PCM por sus siglas en inglés) son capaces de almacenar y de liberar grandes cantidades de calor latente gracias a su propiedad de transición de estado; esto significa que pueden pasar de sólido a líquido y viceversa, lo que hace que funcionen como unas baterías térmicas, por decirlo así.
Este tipo de materiales son ideales para instalarse en paredes, en techos o en suelos, ya que, durante el día, absorben el exceso de calor y mantienen la oficina o el coworking fresco, y, por la noche, liberan el calor almacenado para ajustar la temperatura y que sea más agradable. Al final, esto reduce las fluctuaciones bruscas en la temperatura y el uso de sistemas de climatización activos por muchas horas.
Estos materiales inteligentes cambian de color de acuerdo a la temperatura exterior, lo que regula la temperatura interior. Tan solo imagina que, en los días calurosos, se oscurecen automáticamente para que no entre tanta luz solar y calor, mientras que, en los días fríos, se hacen más transparentes para que haya más luz solar y la habitación se caliente de forma automática; por eso, son tan populares.
Este tipo de materiales inteligentes se fabrican con pigmentos capaces de reflejar la luz del sol. Cuando los instalas en techos o en fachadas, se reduce la absorción de calor, lo que hace que el edificio en general se mantenga más fresco sin necesidad de usar el aire acondicionado. A la larga, esto se traduce en costos operativos más bajos.
El uso de materiales inteligentes es ideal para mejorar, de forma considerable, la climatización en oficinas y en coworkings. Bueno, y no solo eso porque se reducen los costos y se mejora el uso de recursos, lo que beneficia tus finanzas y al ambiente, lo que hace que apostar por estas innovaciones sea una inversión rentable y que deberías plantearte. Renueva tus espacios y notarás la diferencia.