El coaching se puede entender como un proceso que permite que un individuo alcance todos sus propósitos con mayor eficiencia y en menor tiempo, haciendo un uso consciente de recursos, habilidades y sabiendo muy bien cuáles son sus debilidades y fortalezas. Se puede decir que el coaching, además, contribuye a la motivación. Por eso, los sitios de trabajo en las últimas décadas han empezado a implementar estrategias con distintos tipos de coaching empresarial.
El objetivo que persiguen estas organizaciones es tener empleados más comprometidos, mejorar los niveles de productividad y guiar a los trabajadores hacia las respuestas que necesita para incrementar su desempeño. En ese sentido, es importante conocer cuáles son los tipos de coaching en administración a fin de que el proceso sea realmente exitoso. ¿Te interesa este tema? ¡Sigue leyendo este artículo de Coworkingfy!
Uno de los principales tipos de coaching empresarial es el ejecutivo. Surgió en la década de 1980 y se utiliza principalmente para ayudar a desarrollar las competencias personales de los altos directivos de las empresas. Este es uno de los tipos de coaching más ligados al liderazgo, ya que se usa para potenciar esta habilidad tanto a nivel personal como grupal.
Los beneficios del coaching ejecutivo son múltiples. De esta manera, el retorno de la inversión (ROI) del coaching ejecutivo es del 529 %, de acuerdo con un estudio realizado por MetrixGlobal en una empresa del Fortune 500. Asimismo, el coaching ejecutivo permite mejorar las relaciones jerárquicas, ayuda a mantener compromisos, incrementa el autoconocimiento, potencia la imagen de la empresa y facilita la comunicación, haciendo que sea mucho más fluida.
Otro de los ejemplos de coaching empresarial es el organizacional, se trata de una manera de lograr la transformación de una empresa a través de sus empleados. El objetivo de este tipo de coaching es lograr la cohesión de equipos para que tengan una mejor satisfacción y motivación.
¿Quieres aplicar el coaching organizacional en tu organización? Ten en cuenta que obtendrás grandes ventajas. Entre ellas que lograrás tener un mejor clima laboral, tu equipo podrá trabajar más efectivamente, se mejorará la realización de estrategias conjuntas y va a mejorar notablemente el alcance de los objetivos.
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El coaching de equipos se puede entender como un proceso de acompañamiento a los miembros de un team para aumentar su rendimiento. Su meta máxima es estar de lado de los miembros del equipo en su proceso de descubrimiento, redefinición y de optimización de procesos.
El coaching de equipos es uno de los tipos de coaching empresarial que puede ser visto como un potenciador, debido a que permite aprovechar el talento humano. Igualmente, ofrece a los equipos una nueva mirada sobre el rol que desempeñan y la forma en la que han llevado la resolución de conflictos y la toma de decisiones. Para implementar el coaching de equipos en tu organización tienes que seguir cuatro fases:
El coaching en una empresa se lleva a cabo mediante un experto conocido como coach, que puede tener distintos tipos formaciones. Uno de los más populares es el ontológico. Este tipo de coach se basa en entrenar a las personas para que puedan superar los obstáculos internos y externos que le impiden avanzar. Con el coaching ontológico, adicionalmente, se busca reflexionar y tomar conciencia acerca de cómo los empleados están viendo la vida.
El coaching ontológico surge gracias al chileno Rafael Echeverría, luego de que desarrollara la Ontología del Lenguaje. Por su parte, un coach ontológico pretende despertar la conciencia de ser, de hecho, esta es una de las raíces de este tipo de coaching empresarial.
Ahora bien, ¿por qué deberías contratar un coach ontológico para tu organización? Pues, porque consigue los empleados alcancen lo mejor de sí mismos, los participantes aprenden a confiar los unos en los otros, lo que trae como consecuencia que se mejoren las relaciones interpersonales en el sitio de trabajo. Adicionalmente, un coach ontológico está capacitado para eliminar miedos o barreras que los trabajadores puedan sentir.
Un coach ontológico será capaz de aplicar uno de los tipos de coaching empresarial más centrados en la individualidad, espiritualidad y en la conciencia. Busca hacer un proceso de introspección que lleve a lograr objetivos ambiciosos en el largo plazo.
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¿Cómo un coach cognitivo puede ayudar a los equipos y a las empresas? Básicamente porque ejerce uno de los tipos de coaching donde hay una interpretación entre la realidad del empleado y sus pensamientos frecuentes. El coach cognitivo tiene sus inicios a principios de 1990, y agrupa las prácticas de las terapias cognitivo-conductuales y las de las teorías de solución de problemas.
En ese sentido, el coach cognitivo se asume como guía o mediador. De igual forma, es importante porque mediante diferentes técnicas lleva a que las personas descubran qué es lo que quieren, cuáles son los medios que dispone, qué estrategias le funcionan mejor, etcétera.
El coaching cognitivo es uno de los tipos de coaching empresarial que parte de dos premisas. En primer lugar, sostiene que los seres humanos ven mermados sus capacidades cognitivas cuando están bajo situaciones de mucho estrés o presión. En segundo lugar, un coach cognitivo sabe que las ideas y pensamientos que una persona tenga en su vida diaria influyen en cómo se siente o se comporta.
Una vez que se han entendido estas premisas, el coach cognitivo deja estupendas ventajas o beneficios. Es decir, permite superar problemas prácticos que estén afectando el logro de objetivos; mejora el bienestar; las personas tendrán herramientas para hacerle frente al bloqueo emocional y aumenta la recuperación psicológica. ¿Qué esperas para contratar un coach cognitivo para tu empresa?
Un coach sistémico tiene un modo bastante particular de pensar. Esto se debe a que observan a la empresa como un sistema formado por «elementos» que interactúan entre sí. Entonces, ellos se enfocan en que los miembros de un equipo o de una organización puedan contribuir como conjunto al sistema y a lograr un equilibrio global.
Este es uno de los tipos de coaching empresarial más efectivos, debido a que hace que todos los miembros de la empresa puedan contribuir con un valor añadido a su sistema organizacional. Un coach sistémico entiende las diferentes dinámicas que se producen en ese sistema e identificar los patrones de conducta que usualmente pasan desapercibidos por la cotidianidad.
Un coach de este tipo para tener su visión sistemática deben cumplir con seis premisas:
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Un coach de esta categoría ejerce uno de los tipos de coaching más polémicos y controversiales. Esta práctica, surgida en los años 60 en Estados Unidos, puede ser vista como un método que a largo plazo es dañina para los individuos, al mismo tiempo, es señalada como la responsable de potenciar actitudes donde se valora la sumisión ante un grupo o los altos miembros de una organización.
Pero, ¿qué es un coach coercitivo? Es un experto que, en teoría, lo que busca es motivar al individuo y fomentar su sentimiento de pertenencia a un grupo. Sin embargo, puede convertirse en un ejemplo de coaching en una empresa que no siempre es positivo. Este coach coercitivo está preparado para adentrarse en la parte más emocional de un individuo y hace que olvide sus antiguos patrones aprendidos para centrarse en lo que indica el coach.
Asimismo, un coach coercitivo es fuertemente criticado porque se basa en tres preceptos: hacer sentir al individuo como culpable de todo lo que pasa; hacen constante énfasis en que lo que pase en el grupo se queda en el grupo, además de que hacen pensar a los trabajadores que sus sentimientos no tienen importancia.
Los métodos de un coach coercitivo también son bastante disruptivos. Muchas veces los empleados que trabajan en estas sesiones ni siquiera tienen claridad sobre el objetivo que se persigue. O, también, hay casos donde se hacen sesiones extremadamente largas y sin descanso con cambio bruscos de temperatura y se obliga a hablar acerca de experiencias traumáticas. ¡Así que contratar un coach coertivo para una empresa no es una buena idea!
En contraposición a lo anterior, un coach con inteligencia emocional acciona uno de los tipos de coaching empresarial más prometedores. En ese sentido, un coach con esta preparación puede contribuir a la identificación y reconocimiento de las emociones de un trabajador. Otro de los alicientes para formar a los miembros de tu grupo con un coach de este tipo es que dan herramientas exitosas para gestionar adecuadamente las emociones.
El coach de programación neurolingüística es capaz de ejecutar acciones que ayudan a que los individuos puedan cambiar sus hábitos y conductas negativas, pero de una forma muy constructiva. En ese sentido, este es uno de los tipos de coaching empresarial, cuyos coaches lo que pretenden es reprogramar los pensamientos y emociones de una persona con la finalidad de que alcancen su potencial.
Un coach de programación neurolingüística en sus sesiones con las empresas hace que los trabajadores puedan comprender todos sus pensamientos. También da una nueva mirada para resolver conflictos; desde la intuición y no solo a través de la razón. ¿Qué aporta un coach de PNL a las empresas? Hace que los individuos crezcan, promueve creencias y mecanismos proactivos y ayuda a no solo entendernos mejor, sino también al entorno.
Hemos llegado al final de este artículo. Esperamos que tengas una mejor noción acerca de qué tipos de coaching empresarial existen y puedas aplicarlos en tu empresa, de acuerdo a las necesidades que percibas en tu equipo. ¿Ya has participado en una sesión de coaching? ¡Déjanos un comentario!