El liderazgo estratégico tiene la particularidad de que puede ser desarrollado por casi cualquier persona, porque, a diferencia de otros tipos de liderazgo, no es innato, sino que se puede perfeccionar, estudiar e implementar. En ese sentido, las empresas que motivan a sus colaboradores para que tengan una actitud de líder estratégico han reportado grandes rentabilidades, especialmente porque pueden innovar con mayor facilidad en su sector.
Sin embargo, un estudio reciente elaborado por PwC, solo un 8 % de los ejecutivos de las empresas tiene un liderazgo estratégico. ¿Por qué si es tan beneficio, tan pocas empresas lo ponen en práctica?, ¿cómo implementarlo de una manera eficaz? En este artículo de Coworkingfy te explicaremos en detalle. ¡Vamos!
Este tipo de liderazgo no solo organiza un equipo o gestiona los procesos de una empresa, sino que también crea y refina estructuras organizativas para una mejor coordinación que permitan alcanzar los objetivos establecidos. De igual manera, el liderazgo estratégico se basa en ayudar a otros para que sigan una visión.
A menudo, es común ver como se le otorga un estatus e importancia significativa a su ejecución en las empresas, organizaciones, y en todo el mundo corporativo. Pero, ¿por qué? Básicamente, porque ayuda a los colaboradores y empleados de una empresa a aprender a liderar, pero también a ser liderados de la mejor manera posible.
Por otro lado, este liderazgo tiene el objetivo primordial de impulsar la productividad estratégica. Para ello, hacen uso de algunas actividades como manifestación de iniciativas, lluvias de ideas que pretenden establecer una visión clara, mantener la cultura y los valores, entre otros. Con esto, pueden tomar decisiones consensuadas, además de que pueden agilizar u optimizar algunos procesos.
Esta característica del liderazgo estratégico es crucial para analizar los escenarios complejos a los que pertenecen las actividades. En este sentido, el aprendizaje se centra en el análisis e interpretación de la toma de decisiones y la dirección estratégica de la organización. Asimismo, para fomentar el aprendizaje se intenta crear un ambiente sano y con una gran cultura de trabajo.
El liderazgo estratégico está caracterizado por la gestión de recursos con creatividad en función de un contexto o situación determinada y la toma de decisiones que permitan lograr los objetivos. En este caso, se trata de una característica fundamental enfocada en un nivel más operativo. Y, para que todo se logre con éxito, lo común es que se incentive el ingenio.
En la mayoría de los casos donde se aplica este liderazgo, la proyección y la influencia a largo plazo son fundamentales para comunicar y perseguir la misión y los objetivos de la organización. ¡Estas son herramientas bastante usadas por los líderes estratégicos! Y es que la influencia y la persuasión son esenciales tanto para los agentes internos como para los externos, garantizando el triunfo esperado.
En muchos casos, especialmente en organizaciones pequeñas y medianas, el liderazgo estratégico prioriza las relaciones interpersonales entre los miembros de la organización. La comunicación y las habilidades en este sentido son fundamentales para la resolución de conflictos y el éxito general en este tipo de liderazgo.
Otra de las características del liderazgo estratégico es que valora la cohesión grupal, porque entienden que para que una empresa o proyecto tenga las rentabilidades esperadas, necesitan contar con un equipo unido. Por eso, este tipo de líderes fomentan la cooperación y reconocen los logros individuales y de grupo.
La importancia del rol del liderazgo estratégico en las organizaciones es bastante amplia, empezando porque es una combinación de habilidades que son eficaces al momento de lograr objetivos y metas empresariales. Esto se debe a la amplitud del alcance; los líderes estratégicos ven a las organizaciones como interdependientes e interconectadas. En palabras simples, las acciones y decisiones tomadas en una parte de la organización pueden tener un impacto en otras áreas.
A su vez los líderes miran hacia el futuro, desarrollan planes a largo plazo e integran resultados a corto plazo. De esta forma, este estilo de liderazgo permite que los líderes y las organizaciones tengan un enfoque de futuro. Además, es de gran importancia, porque un líder estratégico está orientado al cambio y suele ser quien dirige los nuevos esquemas que se producen dentro de una organización. Las decisiones que toma y su trabajo tienen ramificaciones en toda la organización.
De esta manera, el liderazgo estratégico es un proceso, no una posición, que requiere una participación plena. Entonces, al involucrar a otros, los hace como equipo que se compromete a aprender y crecer.
Es importante saber cómo actuar para implementar el liderazgo estratégico. En ese sentido, el primer paso para llevarlo a cabo en una empresa es crear una cultura de responsabilidad. Para esto, los líderes deben ser abiertos y transparentes con sus equipos. Eso significa establecer una política de puertas abiertas, compartir su visión libremente y celebrar reuniones individuales de forma regular.
El paso siguiente para lograr de manera eficaz la implementación del liderazgo estratégico es estudiar y analizar el entorno empresarial y la competencia. Esto conlleva investigar el mercado, los métodos de venta y las tendencias que pueden venir a futuro. ¿Por qué este paso es imprescindible? Porque contribuye a crear una visión de futuro, facilita el establecimiento de objetivos y permite al líder asegurarse de que todos los miembros de su equipo saben para qué están trabajando.
Asegúrate de que todos los miembros del equipo tienen voz en los procesos de toma de decisiones para que se sientan incluidos, en la medida de lo posible. Asegúrate también de que todas las decisiones estén respaldadas por datos, para que nadie sienta que se le pide que confíe más en su instinto o intuición que en lo que se ha demostrado cierto una y otra vez.
En esta misma línea, puedes disminuir las jerarquías muy marcadas. No se trata de crear caos o perder autoridad, sino de tener un trato mucho más cercano y humano con tus seguidores o colaboradores.
Conviene que celebres reuniones periódicas con cada miembro del equipo y que analices cómo lo están haciendo en relación con los objetivos de su parte del proyecto. Si alguien no está cumpliendo sus objetivos, hay que abordarlo de inmediato para que no se convierta en un problema más adelante.
Una vez que el equipo sepa hacia dónde se dirige y qué debe hacer para conseguirlo, es hora de pasar a la acción. Esto significa tomar medidas para poner en práctica su visión, asegurándose de que todos los implicados estén bien informados de lo que debe suceder a continuación para que tengan éxito como una unidad que trabaja para lograr el mismo objetivo: ¡conseguir buenos resultados mediante la colaboración! Asimismo, es importante que el líder empiece a responsabilizarse de todo lo que suceda, desde ahora hasta el final, para que nadie se retrase ni se olvide de nada.
Otro paso fundamental es fomentar una cultura del fracaso. Los líderes estratégicos deben estar dispuestos a admitir el fracaso temprano y hacer que sea parte del proceso. Esto les permite comprender los tipos de fracaso y de esta manera replantearse cómo lograr el éxito. También deben aprender a manejar el estrés asociado con la incertidumbre y la recuperación luego de no obtener los resultados esperados.
Directora de LinkedIn España y Portugal, Sarah Harmon, es un gran ejemplo de líderes estratégicos. Ella ha tenido una visión innovadora, lo que le permitió obtener un papel fundamental en el área de ventas de LinkedIn y, además, fue la encargada mundial del lanzamiento de Microsoft Office 365. Con el paso de los años, Harmon ha mejorado su liderazgo y reconoce que gran parte de su éxito se debe a su capacidad para motivar a los equipos con los que coopera.
Tim Cook es otro de los líderes estratégicos. Cook fue clave para que la empresa estadounidense Apple pudiera afrontar un proceso de transición luego de la muerte de su fundador Steve Jobs. Cook hizo que este suceso, de manera interna, no corrompiera las líneas de producción, además de que mantuvo las acciones de Apple con cierta estabilidad. También, desarrolló nuevos productos y abrió las tiendas minoristas en China. ¡Todo con mucha estrategia!
El fundador de FedEx es un gran líder estratégico, que a pesar de que las críticas, se atrevió a seguir su visión y crear una empresa de servicio de paquetería, que posee más de 1.000 millones de dólares de facturación anual. ¿Su secreto? Tener un espíritu decidido y tratar a sus empleados por igual sin importar dónde se hallen dentro de la estructura jerárquica de la empresa.
Escrito por Alexander Hiam es un libro que te ayudará a perfeccionar todas las destrezas necesarias para que puedas gestionar el rendimiento de tus empleados. Por medio de algunos ejercicios, contribuirá a definir una estrategia para alcanzar objetivos por medio del liderazgo estratégico.
¡Descubre la fuerza impulsora para hacer consistente tu liderazgo! Esta es una obra de Mike Freedman y Benjamín Tregoe, quienes escribieron este libro que busca alejarse de los clichés y frases comunes. En este escrito, encontrarás una forma sencilla y didáctica de tomar decisiones y aprenderás cómo puede este tipo de liderazgo orientarte en el futuro.
Su autor es el profesor Guillem Bou Bauza y es un libro que enseña a los interesados a manejar una empresa en un entorno donde la competencia en el mercado es bastante agresiva y donde mantener un equipo cohesionado puede parecer toda una hazaña. En este libro, el autor se ha alejado de lo convencional y anécdotas para darle al lector conceptos claves de la dirección estratégica de los colectivos humanos.
De los autores Anne Gregory y Paul Willis, es un libro corto que te presenta una lista de las capacidades esenciales que se deben adquirir en el liderazgo estratégico. Especialmente si eres un profesional que quiere situarse en las esferas más influyentes de cualquier organización. También resalta el valor de la comunicación.
Liderazgo de equipos con entusiasmo estratégico es un libro escrito por Juan Malaret. Es la obra más recomendada si quieres aprender todo sobre el concepto de liderazgo estratégico. De hecho, este material es utilizado en los programas Master de la Universidad Politécnica de Catalunya y en el ICADE (Universidad Pontificia de Comillas)en Madrid.
El liderazgo estratégico es una forma de dirigir que conduce al éxito. Es el tipo de liderazgo que te ayuda a alcanzar tus objetivos, incluso cuando aún no puedes verlos. Y, en definitiva, el liderazgo estratégico es una habilidad que requiere práctica, pero también es algo que se puede aprender y querrás seguir aprendiendo mientras trabajes en la empresa. ¿Ya conocías este estilo de liderazgo?