¿Tienes un emprendimiento o startup, pero no te alcanza el dinero para establecer tu propia oficina? No estás solo. Iniciar un nuevo negocio conlleva gastos importantes que no siempre puedes cubrir. Por ello, existen alternativas para que puedas trabajar en remoto sin dejar de proyectar una buena imagen a tus clientes o usuarios. En Coworkingfy hemos hablado sobre los espacios de coworking, las oficinas compartidas y el hot desking. Sin embargo, existe una opción que te ofrece un domicilio laboral o fiscal sin tener que habitarlo (ni pagar sus altos costos). ¿Quieres conocerla? Acá te contamos en qué consisten las oficinas virtuales, cómo funcionan y qué beneficios puede traer para tu empresa emergente.
Las oficinas virtuales son espacios donde se manejan actividades de un modo no tradicional. Ofrece todos los beneficios de una oficina, sin tener la necesidad de ocuparla físicamente. Su mayor ventaja radica en que ofrecen dirección postal, domicilio comercial y fiscal, imprescindible para llevar a cabo gestiones legales, fiscales y laborales.
Se desconoce con exactitud cuál es su origen, y muchos se atribuyen su creación. Chris Kern alega ser el pionero de esta práctica, por un artículo de revista que publicó en 1983. Por otra parte, se señala que la empresa Servcorp fue la primera en incursionar en los términos y aplicaciones de la industria virtual y oficina de servicios en 1978. También se dice que empezaron a tomar forma alrededor de 1990, gracias a la aparición de las microcomputadoras y equipos de comunicación de menor precio. Esto facilitó a muchos emprendedores y freelancers de la época poder trabajar desde sus casas y ahorrar costos.
Actualmente, son muchas son las empresas que hacen manejo de este recurso en sus páginas web. Y cada vez más son las corporaciones que ofrecen este servicio, incluyendo los centros de negocios y los espacios de coworking.
Para explicar cómo funcionan las oficinas virtuales, podemos tomar como ejemplo los beneficios que ofrecen los programas especiales de algunas empresas del sector::
Gracias a las oficinas virtuales podrías acceder a estos servicios a un bajo costo, en comparación con los precios de una oficina convencional. Esto proporciona, ante los clientes, una mejor imagen para la empresa que la que podrías brindar solo trabajando desde casa, sin un espacio físico para atenderlos cuando sea necesario.
El uso de oficinas virtuales fortalece entonces la confianza de los usuarios por tu compañía. Contribuye también con el ahorro de gastos operativos e impuestos, y aporta, además, privacidad a tus activos.
Sin embargo, el ahorro de impuestos es uno de los aspectos que, por años, se ha buscado regular en esta práctica. Por carecer de espacio físico, muchos negocios escapan de la carga tributaria, y esto actúa en perjuicio del Estado. Asimismo, muchas empresas que ofrecen este servicio garantizan la protección de confidencialidad y privacidad de los verdaderos propietarios de los negocios. Esto, en opinión de algunos expertos, se puede prestar para negocios turbios. Por ello, existe un debate constante sobre si son legales las oficinas virtuales.
Existen diversos tipos de oficinas virtuales que se ajustan a las necesidades de los emprendimientos o startups. Aquí te mostramos las más importantes:
Esta clase de oficinas ofrecen sus servicios a pequeños emprendimientos que recién inician. También a empresas tradicionales que requieren aminorar costos.
Por lo general, estas oficinas se inclinan al servicio de gestión de correos y de la comunicación de sociedades offshore. Son muy útiles para personas que buscan confidencialidad, dado que no son tan rigurosas como las anteriores para la comprobación formal de sus clientes. También gestionan los datos de sus clientes de manera confidencial.
Se dedican a los dos tipos de servicios, tanto de negocios locales como offshore.
Este tipo de oficinas virtuales ofrecen el servicio de recepción de correo. Son de gran utilidad para aquellos negocios que carecen de domicilio fijo y, por ende, de dirección postal.
Este tipo de oficinas cuentan con un equipo multidisciplinario de profesionales, desde contadores, abogados y administradores, hasta secretarias. Ofrecen a las empresas apoyo en diversas áreas. Esto se traduce en una mejor imagen para la compañía antes sus clientes.
Ofrecen sus espacios físicos para aquellos profesionales que trabajan desde casa, y que en muchas ocasiones necesitan rentar sus instalaciones para actividades específicas. Contar con un espacio físico puede mejorar tu imagen corporativa. Este es el servicio que prestan, regularmente, los espacios de coworking que cuentan con oficinas virtuales.
Son aquellas que brindan el servicio de operador telefónico, gestionando así las llamadas de tu negocio. Este servicio, usualmente, es utilizado por las personas que se encuentran de viaje.
Ya vimos para qué sirve una oficina virtual. Ahora, te mostramos qué las caracteriza y diferencia de las oficinas convencionales:
El uso de oficinas virtuales ha demostrado ser positivo para muchas compañías. Sin embargo, estas también tienen algunas desventajas:
Son muchas las oportunidades que han surgido en los últimos años para los emprendedores que desean darle un impulso a su negocio emergente. Espacios de coworking, hot desks, oficinas compartidas y oficinas virtuales tienen en común su objetivo: facilitar la labor de aquellos que no pueden costear espacios propios y servicios de calidad óptima.
Particularmente, los servicios que ofrece una oficina virtual se diferencian del resto de las opciones por evitar el traslado de los trabajadores a un sitio específico. Y, aunque ofrecen sus espacios para quienes los requieren, brindan flexibilidad para quienes trabajan desde casa y desean dar una buena impresión a sus clientes.
Si bien, su práctica ha sido cuestionada, también es cierto que muchas compañías de todo el mundo se han visto beneficiadas con su uso. Muchos nuevos empresarios han visto en la oficinas virtuales una alternativa para crecer sin una gran inversión inicial.