¿Te imaginas poder probar en una semana si una idea será exitosa? Gracias a Google Ventures, desde 2010 es posible. Pero ¿cómo? La respuesta está en el Design Sprint, la metodología de Google que te ayudará a validar una idea de negocio en apenas cinco días.
Luego de leer este artículo, tendrás claro qué es el método Design Sprint, sus diferencias con el design thinking y cómo aplicarlo paso a paso. ¡No te lo pierdas!
Si tienes un emprendimiento o una startup, es probable que sepas que para validar un negocio o un producto o servicio debes seguir cuatro pasos fundamentales: idear, construir, lanzar y aprender de los usuarios finales. Pero ¿sabías que puedes saltar del primer al cuarto paso y probar el éxito de tu idea antes de concretarla por completo? En 2010, el equipo de Google Ventures creó el Design Sprint, una metodología que te permite hacerlo.
En español, la traducción de sprint es carrera de máxima velocidad. Lo mismo ocurre con este joven método, que esta diseñado para que puedas validar tu negocio en apenas cinco días. Para su creación, Google estudió cientos de estrategias de User Research y Design Thinking. Tomó lo mejor de cada una para conseguir comprimir varias semanas o meses de trabajo en apenas unos días.
Aunque ambos están enfocados en la creación y prueba de ideas o productos, existen claras diferencias entre design thinking y design sprint:
El design sprint está diseñado para concretarse en seis fases que deben llevarse a cabo en máximo cinco días. Sin embargo, existen equipos de trabajo que las aplican en lapsos más cortos. El tiempo invertido dependerá de las necesidades del equipo. No obstante, lo recomendado por expertos es desarrollarlo entre lunes y viernes.
Acá te contamos cuáles son las etapas del design sprint:
Aunque el design sprint está diseñado para concretarse en cinco días, es importante que antes de iniciar tengas todo preparado. Lo ideal es que el equipo esté conformado por un máximo de siete miembros, y que cumplas con los siguientes pasos:
El primer día del design sprint el equipo de trabajo se dedicará a comprender el proyecto y sus objetivos. ¿Qué datos tienen? ¿Cómo aprovecharlos? Cada uno tendrá una intervención en la que expondrá lo que sabe sobre el tema y cómo cree que puede aportar a su desarrollo desde su área de trabajo.
Este proceso se puede dividir en tres fases de acuerdo con las horas del día:
En esta etapa se diseñará el boceto del proyecto, planteando soluciones y pasos para concretarlo. A través de una lluvia de ideas, se llegará a un consenso. Aunque la decisión se toma de forma grupal, en esta fase del design sprint los miembros del equipo de trabajo tendrán un espacio para organizar sus propuestas individuales.
Se puede realizar de la siguiente manera:
En esta fase se decide cuál de las ideas se llevará a cabo. Esta debe ser aquella que contribuya con el cumplimiento de los objetivos planteados desde el primer día. Para ello, se estudiarán todas las propuestas del día anterior.
Con un guión definido, el cuarto día del design sprint el equipo de trabajo se dedicará a construir el prototipo. No es necesario que este esté completo, sino que sea una fachada muy realista sobre lo que será el producto o servicio final. ¿Por qué? Porque la idea es validar si, en efecto, será exitoso. Dependiendo de la validación el producto este se concretará completo o no.
Este es el paso por el que has trabajado toda la semana. El día de la validación tu prototipo será probado por los clientes seleccionados. En esta fase podrás validar si la idea funciona o no, y cómo es la receptividad del usuario. Es importante que cada miembro del equipo esté presente y que se realice la encuesta elaborada el día anterior.
Grandes empresas han comprobado los beneficios del design sprint, no solo para la validación de nuevos productos o negocios, sino también para la renovación de alguno ya existente, o para aumentar su visibilidad. Te mostramos ejemplos exitosos de compañías que han utilizado el método de Google Ventures design sprint:
Slack es una herramienta de comunicación ideada para la gestión de equipos de trabajo. Permite chatear, compartir archivos de diversos tipos y crear espacios de trabajo virtuales similares a los de una oficina. Sin embargo, la aplicación nació como una forma de comunicación interna para una compañía de videojuegos.
Aunque al comienzo de su comercialización fue popular entre startups, sus creadores ejecutaron un design sprint para aumentar su visibilidad entre compañías de otra índole. El resultado fue el que se predijo en este proceso. Hoy, Slack tiene miles de suscriptores y grandes clientes como IBM, Autodesk y Shopify.
La metodología de Google sirve para más que validar negocios. La prueba es ShareTheMeal. Esta es una aplicación que recoge dinero para alimentar a los niños de todo el mundo por solo $ 0.50 al día. Esta herramienta fue creada aplicando el design sprint. Pero, pese a su buena acogida, no conseguía recolectar todo el dinero que requería el Programa Mundial de Alimentos de la ONU. Por ello, con otro design sprint, el ente definió un nuevo prototipo para aumentar las donaciones.
¿El resultado? Hoy, ShareTheMeal ha recaudado fondos para la preparación y distribución de más de 24 millones de raciones de comidas a personas necesitadas.
Si te gusta meditar, seguro has escuchado sobre Headspace, una aplicación para celulares que te ayuda a enfocarte en esta práctica. La herramienta está dirigida tanto a adultos como a niños. Y esta última opción se desarrolló a través de un design sprint.
El mayor reto que enfrentaba la plataforma era el de atraer a los pequeños a una práctica tradicionalmente practicada por adultos. Crearon un prototipo, lo probaron con un grupo de niños y, a partir de los hallazgos obtenidos, desarrollaron otro sprint de diseño para perfeccionar la idea.
La mayor prueba de que la metodología de Google funciona es que ellos son parte de las empresas que la aplican exitosamente. Uno de sus casos más emblemáticos es el design sprint que realizaron para optimizar su proceso de selección de nuevos empleados. Con un sprint de tres días, la empresa rediseñó su aplicación GHire, una herramienta que supervisa el proceso de aplicación a sus vacantes laborales. Con los cambios realizados, GHire perfeccionó su capacidad de evaluar las habilidades de los candidatos de forma rápida y eficiente
Para Lego, la famosa empresa de juguetes infantiles, el design sprint se convirtió en rutina. En la búsqueda de un método que les permitiera renovar constantemente su oferta, la compañía se centró, durante dos meses, en la realización de múltiples jornadas de sprints de diseño. El resultado obtenido fue tan favorable que ahora los realizan una vez por mes. Con esta metodología de Google, Lego ha diseñado, probado prototipos y hecho lanzamientos de docenas de productos.
El tiempo es oro cuando se decide emprender un negocio o lanzar un nuevo producto. Por ello, plataformas como Google Ventures están es la constante búsqueda de métodos que permitan a los empresarios acelerar el desarrollo de sus ideas. El design sprint es una de las estrategias más eficaces y rápidas para validar una idea o negocio, y su proceso estrictamente definido hace que sus pasos sean fáciles de seguir.
Como en el design thinking, en este método de Google se da especial importancia a la intervención del usuario. Esto permite no solo verificar si el producto es o no viable, sino también estudiar si va a satisfacer al cliente, un elemento fundamental en el éxito de una empresa. Además, hace uso del trabajo colaborativo y sus ventajas, aprovechando la cohesión del equipo de trabajo para potenciar el desarrollo de nuevas ideas.
También te puede interesar: